Superar la sequía ya es un desafío, los estragos de la pandemia todavía se están midiendo, y los planes de empleo rural que en otras ocasiones sirven como salvavidas económicos, han desaparecido y las autoridades no han dado respuesta de nuevas propuestas.
Ante este difícil escenario dirigentes vecinales y sociales de Punitaqui, una de las áreas más golpeadas por la sequía y ahora por la crisis sanitaria, se están uniendo para exigir la reactivación de nuevos programas de empleo rural en la comuna.
El presidente dela Junta de Vecinos de El Llanito, Adrián Valdivia, indicó a El Ovallino que hace algunas semanas finalizó el último un programa de empleo en ese sector, gestionado a través de CONAF que se había iniciado en septiembre de 2019 hasta abril de este año.
“Hoy en día en medio de una pandemia, se necesita con urgencia el apoyo de un programa de Empleo y especialmente en los sectores rurales quienes en este último tiempo han sido los más afectados. En los sectores rurales hay tres fuentes de ingresos, la agricultura, que bien sabemos debido a la sequía que tenemos nuestros agricultores están complicados en el tema de producción, y también se vieron afectados por el tema del agua, donde muchas personas tienen que sacarla a través de moto bomba donde ya les origina un gasto extra”.
Refirió que el segundo factor que les ha afectado es la escases hídrica, ya que la sequía afectó a los crianceros quienes no consiguen pasto para sus animales y por si deben comprar o vender su ganado, que son el sustento de sus hogares. También los temporeros se han visto afectados por la crisis.
“Hacemos un llamado a las autoridades comunales como de gobierno, a inyectar recursos con urgencias a un programa de empleo que vaya en directo beneficio a las personas del área rural, bien sabemos que el gobierno está entregando ayudas sociales, y se agradecen, pero lamentablemente no son suficientes, donde también hay que pagar gastos básicos del hogar como luz, gas, sin contar tv cable, celulares entre otras deudas que presenta cada familia. No nos podemos quedar en casa sin tener recursos y sabiendo que tenemos una familia que alimentar”, explicó el dirigente vecinal.
En suspenso
Por su parte, el presidente vecinal de La Polvareda, Juan Araya, refirió que los programas de empleo que en su comunidad habían beneficiado a ocho vecinos, actualmente estarían en pausa a la espera de nuevos proyectos.
“Los últimos planes fueron de Conaf. Para esta fecha, otros años, habían otros planes de empleo, pero ahorita no hay ni si quiera un proyecto, no sabemos nada, y es justo cuando más lo necesitamos”, lamentó Araya, quien agregó que cuando hay un plan de vialidad en la zona, por lo general las empresas trasladan a los trabajadores no calificados desde otros sectores, sin tomar en cuenta a los trabajadores locales.
En tanto la presidenta de la junta vecinal de Altos de Pechén, Karen Cofre, indicó que los vecinos cuentan con cada vez menos recursos.
“Nos imaginamos que estos programas van a quedar suspendidos, porque nadie nos ha dado respuesta sobre si continúan o no. Producto de la sequía en el campo no tenemos ahorita la entrada económica de antes, y por lo que las personas básicamente están sobreviviendo con la pensión si la tienen, y eso no alcanza para mucho. Los vecinos de los sectores rurales tenemos que hacer maravillas con los pocos ingresos que se están recibiendo, ahora con el virus el gasto es mayor”, indicó Cofre.
Adelantó que en los próximos días realizarán una solicitud en conjunto, entre varias juntas vecinales rurales, para solicitar a las autoridades planes de empleo para las comunidades rurales.