Trabajadores de minera reciben sus pagos adeudados después de meses

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    Después de varios meses en que los trabajadores esperaron por el pago de sus sueldos, finiquitos e imposiciones legales, los mineros de Altos de Punitaqui concluyeron una etapa que los mantuvo en vilo por mucho tiempo.

    Los trabajadores, entre ellos supervisores y operadores en mina, arrastraban incertidumbre que los ha afectado de tal manera que incluso no pudieron buscar nuevas opciones de trabajo, al mantenerse ligados contractualmente con la minera.

    La insolvencia económica de la empresa llevó a que se desarrollara un proceso de reorganización judicial y en el que se acordó el pago de su deuda, tanto comercial como laboral, con sus distintos acreedores y trabajadores, que en junio del 2020 ascendía a cerca de $27 mil millones a 399 acreedores.

    Después de procesos judiciales, la empresa rebajó la deuda a cerca de un 50%, siendo la empresa KDM Energía SA, Kabba y Enami a quienes más se les adeuda, pero un sinfín de contratistas y otros operadores que mantenían arriendos de maquinaria y vehículos, los cuales hoy esperan que se les pague lo adeudado.

    Fue así como el pasado miércoles y viernes un grupo de abogados que representaba a la minera llegó a Ovalle, acordando el pago de la deuda comercial, previsional y laboral con los afectados.

    A pesar que los trabajadores están en el proceso de recibir sus pagos adeudados, muchos no quedaron conformes con el acuerdo.

    “La mayoría de los trabajadores arreglaron sus finiquitos, otros lo arreglaron individualmente. El arreglo que se llegó no fue ciento por ciento bueno para todos los trabajadores, a algunos los benefició y otros salieron ‘perdiendo’. De acuerdo a nuestras conclusiones, esto se debió a que la empresa utilizó la estrategia de dejar a un número de trabajadores dentro de la empresa para rehacer las operaciones, y los que estábamos fuera (o no considerados) presentamos nuestra propuesta de finiquito. Con el presupuesto que la empresa tenía fueron pagando a algunos trabajadores, por ejemplo, a algunos trabajadores con 10 años de servicio los perjudicaron notablemente al no reconocer sus años de servicio”, sostuvo Héctor Arias, presidente de uno de los sindicadores de trabajadores.

    Además, algunos trabajadores señalaron a este medio que la empresa no habría pagado la totalidad de las cotizaciones previsionales adeudadas, pero varios las habrían aceptado “por desesperación por recibir el finiquito”, que es necesario para poder ser contratado en cualquier otro trabajo.

    “Creo que desde un momento la empresa jugó ‘al vivo’. Hicieron una propuesta de reorganización, pero después nos fuimos dando cuenta, de acuerdo a información internacional, que nunca hubo organización, siempre vino una empresa extranjera a pagar lo que se debía. Entonces, no era necesario hacer este show y pagar lo que correspondía a los trabajadores. Ahora, eso sí, tenemos nuestro finiquito para poder trabajar y muchos de nosotros buscaremos otros rumbos”, sostuvo el dirigente sindical.

    Después de una larga y compleja negociación con la Comisión de Acreedores la minera llegó a un acuerdo con cerca de 120 trabajadores. Toda la aprobación de finiquito a los trabajadores estaba sujeta a la bolsa de valores de Toronto, en Canadá, ya que las acciones de los nuevos inversionistas (empresa BMR Corp) se transan en dicha bolsa. Apenas llegó la autorización, el inversionista transfirió los $27 mil millones a 399 acreedores y a los trabajadores.

    Los inversionistas habrían pagado cerca de 75% de los finiquitos de cada trabajador y la totalidad de los sueldos adeudados.

    De esta forma, unos conformes y otros no, se sella el conflicto laboral que mantuvo por varios meses a trabajadores de la Minera Altos de Punitaqui sin recibir sus sueldos adeudados, cotizaciones impagas y sin su finiquito correspondiente tras el proceso de reorganización judicial.

    Extraoficialmente se conoció que los nuevos inversionistas seguirán explorando el yacimiento y en el corto plazo no se produciría cobre.