Sin respeto por los deudos, por la memoria de los difuntos o por la sociedad que merece recordar a sus familiares con tranquilidad.
Así describió Germán Cortés, vecino de Monte Patria, la situación vivida desde principios de esta semana cuando se enteraron que antisociales vandalizaron el nicho en el que reposan los restos de su pequeño hijo de solo seis años de edad.
“Nunca habíamos visto algo así en Monte Patria, esto es lo último que uno puede pensar que puede pasar en un cementerio. Nosotros venimos todos los fines de semana porque Germán fue nuestro único hijo. Pero esta semana cuando vinimos el lunes, notamos como con un fierro rompieron los bordes del ventanal de aluminio, la arrancaron con el vidrio intacto –que no se la llevaron sino que la dejaron a un lado- y se llevaron los juguetes que le habíamos dejado”, acusó el comerciante montepatrino.
Señaló que en el lugar, y protegido por el ventanal, le habían dejado como memorial al niño de seis años (fallecido por un tumor en 2013) un camión de juguete de gran valor, una serie de autitos, de juguetes de huaso que le gustaban al pequeño y otros detalles infantiles.
“Cuando llegamos no tenía ninguno de sus juguetes y estaban los maceteros en desorden. Rompieron el ventanal para llevarse algo de un niño fallecido, eso no tiene sentido”, advirtió Cortés.
El recinto, bajo la administración de la iglesia, no cuenta con un vigilante formal o permanente, y su cerco perimetral ofrece poca resistencia, por lo que sería muy fácil ingresar desde cualquiera de sus costados.
La denuncia del hecho fue consignada inmediatamente en Carabineros, quienes tomaron constancia del delito.