Sorpresa causó a un agricultor de Potrerillos Alto y Nueva Aurora al percatarse que frente a los predios agrícolas del sector aparecieron grandes maquinarias de minería. La situación tenía razón con una explotación de hierro que se pretende reabrir en el sector rural, tras cerca de 50 años.
Cercanos manifestaron que se trataría de una compañía minera china, quien realizaría explotación de hierro y posterior chancado del material.
“Hace unos 15 días noté algo raro frente al predio donde trabajo, ya que empezaron a llegar camiones y máquinas, que llevaban materiales para una planta minera. Recuerdo que fue de la nada, me causó cuidado verlos llegar con materiales que uno no ve mucho acá, los que son para trabajos mineros.
Eso me llamó la atención por lo que di aviso a los dirigentes de la zona, para que se diera a conocer esto, ya que evidentemente esto va a traer serias consecuencias con nuestro trabajo que es la agricultura y la salud de los habitantes del sector”, expresó el productor que dio la voz de alerta.
El presidente de la junta de vecinos de Potrerillos Alto, Luis Alfaro, y el presidente de la Asociación de Canalistas del Embalse Cogotí, Francisco González, se pusieron al tanto de este escenario, comenzando luego a propagar la información.
“Me enteré el viernes en la tarde, me llamaron a una reunión donde me dijeron que habían visto las maquinarias mineras. La primera reacción fue de recordar, la gente antigua me comentó que hace unos 50 años se explotaba mineral desde el mismo lugar, faenas que habían causado muchos problemas de salud, conversé con gente adulta y varios me dijeron que mucha gente falleció producto de los daños que causó”, sostuvo Luis Alfaro.
Mientras que el representante de la Asociación de Canalistas del Embalse Cogotí (tranque que reparte los derechos de agua del sector), sostuvo que “a penas supimos de esto nos generó miedo de todos los problemas que puede traer. Principalmente hablemos de un problema con el agua potable”.
González agregó que los trabajos traerían conflictos con los usuarios del Agua Potable Rural (APR). “Esto afectará a los APR de la zona con los cambios de las napas subterráneas por las explosiones. El problema más grave es que todos los pozos profundos de donde se extrae el agua potable son pozos que dan muy pocos litros de agua por segundo, estos son muy sensibles a cualquier variación. Por ejemplo, cuando fue el terremoto de septiembre del 2015, los pozos se afectaron bastante, porque el movimiento telúrico cambió el curso de las napas. La minería significaría que si los pozos dejan de producir el agua, habría parte de la población que se quedaría sin agua para el consumo”.
Alfonso Araya es el presidente del club de adulto mayor del sector, y recuerda que cuando tenía unos 17 o 18 años en el lugar se explotaba hierro. “La mina se explotó por muchos años, en ese tiempo había gente enferma producto de la polución, pero la gente trabajaba igual. Por esto, y sabiendo los problemas que traería, nos preocupa como vecinos los trabajos que realice la minera”.
En medio de los cerros de Nueva Aurora ya se pueden ver algunas maquinarias removiendo materiales para iniciar las faenas.
Desconocimiento
El Ovallino recorrió la localidad de Nueva Aurora. El sector se ubica a no más de un kilómetro del yacimiento minero que se comienza a levantar. Para nuestra sorpresa, la gran mayoría de los vecinos desconoce el proyecto minero.
“Sólo hemos escuchado comentarios de vecinos y en la micro, pero nada con certeza”, dijo Juan Castillo, mientras María Araya indicó que “no teníamos idea de que a la zona había llegado una empresa minera”.
María Isabel Barraza, dirigente de la junta vecinal de Nueva Aurora, señaló que “lo único que sabemos en estos momentos son rumores, hace un tiempo nos pidieron apoyo para oponerse a los trabajos de una futura minera. Pero nadie se ha acercado a hablar con nosotros”.
Al interior de la Escuela Aurora de Chile, de la localidad Nueva Aurora, poco conocían del tema. Su director, Milko Peña Olivares, mencionó que “yo había escuchado rumores que llegaba una minera, por lo que no le puse mucha atención. Ahora que nos ponen al tanto lo creo y nos genera preocupación. Yo conozco la zona desde hace muchos años, por lo que me acuerdo que hace muchos años se explotaba mucho hierro, y lo hacían tres empresas, trabajando las 24 horas del día. Era un yacimiento que dio mucho auge a esta zona, pero ahora aterrizando en la actualidad por supuesto que va a traer consecuencias para la población”.
El director del establecimiento se mostró inquieto. “Esta es una zona agrícola, donde tenemos muchos nogales, viñas, paltos, mandarinas y limones, los que se verían afectados.
Si sumamos al problema de la sequía, y si se contaminan las aguas, traería otros problemas a los vecinos. Además recuerdo que en las cercanías de la mina hay un riachuelo con agua limpiecita, y con la explotación minera ya no se podría ocupar”.
Quien se sumó a la discusión fue Rosa Ángel, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos del sector Rural. La conocida dirigente también expresó que “nuestra inquietud es que la llegada de la minera generará varios daños. Por ejemplo los problemas de salud de la gente, porque las minas de hierro emanan polución que dañan los pulmones. También nos preocupa el daño a la agricultura que esto provocaría, teniendo en cuenta que la zona se vale por cerca del 80% de la producción agrícola.
Se trata de pequeños productores que surten a la ciudad de las verduras. La minera generará un daño irremediable, además habrá problemas con las aguas subterráneas, nuestra región sufre problemas de sequía y con las detonaciones se dañarán las napas subterráneas”.
A unos 600 metros del yacimiento que se pretende explotar se encuentra el pozo de captación de agua de Potrerillos Alto. Los vecinos creen que la explotación afectaría el suministro del vital elemento.
Llegan por la ventana
El dirigente de Potrerillos Alto, Luis Alfaro, manifiesta que esta empresa minera “ha llegado por la ventana”, aludiendo a que en ningún momento ha habido diálogos entre vecinos y la compañía.
“Si no es porque fueron los propios vecinos del sector que se dieron cuenta de la presencia de la minera, jamás abríamos sabido nada, porque la empresa minera no ha informado nada”, señaló.
Mientras María Isabel Barraza, refirmó lo mencionado por Alfaro. “Al menos de la empresa minera no hemos recibido ningún tipo de información, ellos no se han acercado a la junta de vecinos”.
A más de 50 kilómetros al norte del lugar se ubica Pejerreyes. Este poblado convive desde hace unos 4 años con la empresa minera china Co. El dirigente del sector, Fernando Elorza, manifiesta que el ejemplo que ellos conocen da cuenta que “las mineras chinas llegan de forma violenta, se instalan y no se acercan ni le preguntan nada a la comunidad”.
Elorza agregó que “uno piensa que pueden traer fuentes laborales, pero la realidad es que no contratan gente de la zona. En Pejerreyes no hay más de una persona contratada, la mayoría es gente oriental”.
La gran mayoría de los habitantes de Nueva Aurora desconocen que a menos de un kilómetro de distancia se encuentran iniciando obras en un yacimiento minero.
Estado del proyecto
El Ovallino intentó localizar a algún representante de la empresa minera, pero en el lugar donde ya se encuentran establecidas las maquinarias nadie contestó al llamado.
De acuerdo a lo expresado por Cristofer Flores, encargado de la Unidad de Gestión Ambiental de la Municipalidad de Ovalle, muchas personas creen que el municipio es el principal órgano involucrado en el otorgamiento de permisos para mineras. “La realidad es que esta facultad recae sobre dos servicios de gobiernos: Sernageomin (cuando los proyectos mineros proponen producción mensual inferior a 5.000 ton/mes) y el Servicio de Evaluación Ambiental, cuando la producción propuesta es mayor a ello. El rol de las municipalidades durante los procesos de obtención de permisos de esta actividad productiva es el pronunciamiento en base a los instrumentos regulatorios locales como Pladeco, Plan Regulador y Ordenanza.
Por otra parte, agrega Cristofer Flores, “esta Municipalidad, a través de la creación de la Unidad de Gestión Ambiental, ha orientado a los vecinos respecto a los canales y vías de participación en los procesos y asesoría profesional para canalizar sus requerimientos, consiguiendo importantes logros en beneficio de las comunidades y su calidad de vida”.
Igor Díaz, seremi de Minería de la región de Coquimbo confirmó que el proyecto minero no cuenta con las autorizaciones pertinentes para iniciar sus funciones.
“Revisamos los antecedentes y podemos señalar que en el lugar no tenemos ningún proyecto autorizado, no se ha permitido la explotación en la localidad. Este caso corresponde a una denuncia y ya hemos informado a Sernageomin (Servicio Nacional de Geología y Minería) para que se analice la situación y se esté atento”, expresó.
El secretario ministerial añadió que “no hay absolutamente nada que de vigencia a este proyecto. No existe la autorización de Sernaogemin. Para que un yacimiento comience a funcionar se necesita una evaluación previa y esto no existe, no hay aprobaciones para realizar trabajos en el lugar”.
Al consultar por el proyecto en la seremía de Medio Ambiente se informó que los trabajos no asoman en el Servicio de Evaluación Ambiental, lo que significaría que la explotación no superaría las 5 mil toneladas anuales o que los propietarios no han ingresado el informe a la evaluación.
Algunos daños
El geógrafo del Consejo de Monumentos Nacionales, Javier Cañete, dio a conocer algunos daños que traerían la explotación de hierro en el sector.
“La actividad minera pasa a llamarse una actividad de alto impacto atmosférico, donde el material particulado se convierte en una nube contaminante que se dispersa en diferentes lugares, lo que terminaría cayendo en las plantaciones del lugar, como un tipo de lluvia ácida.
Además, dependiendo del lugar dónde se encuentre el área de producción, se podría generar otro tipo de contaminación.
La pregunta que debemos hacernos es saber dónde van a ir a parar los materiales pesados, aquellos desechos que se producen. Si se genera un tranque de relave hay que estar atento a donde van a parar los desechos”.