Un edificio que cambia rotundamente el paisaje del corazón de Ovalle, y también la manera de convivir administrativamente con la ciudad, ya que reuniría en un solo lugar todas las dependencias municipales para trámites y servicios, y albergaría a más de 650 funcionarios locales.
La construcción del Edificio Consistorial de Ovalle, de siete pisos habilitados con una intervención de 14.130 metros cuadrados, alcanza casi la mitad de su obra, tanto en lo físico como en lo administrativo, y aunque enfrenta desafíos en el camino, su entrega no se alejaría mucho de los plazos acordados en un principio.
La obra, impulsada por el municipio de Ovalle y financiada por la Subsecretaría de Desarrollo Regional y el Gobierno Regional de Coquimbo, por un monto que alcanza los 21.500 millones de pesos y está siendo ejecutada por la empresa Constructora San José.
Sobre las gestiones, el Director de Obras Municipales, Glen Flores, explicó a El Ovallino los avances y desafíos que presenta un proyecto de tal envergadura.
“Llevamos sobre un 46% de avance real físico, mientras que en el pago del contrato registramos un 43% cancelado, es decir, que llevamos más avances construido que lo que hemos pagado, pero esas son situaciones burocráticas normales”, precisó.
PLAZOS AMPLIABLES
Indicó el funcionario que si bien las obras avanzan a buen ritmo, ya se habría solicitado una ampliación en el plazo de la entrega, lo que retardaría su puesta en marcha.
“En lo que estamos un poco complicados, es que la empresa está pidiendo ampliaciones de plazo, solicitud que ha tenido que justificar, y somos las autoridades las que tenemos que evaluar la situación. Pero la obra el edificio va avanzando bien, se están realizando las inspecciones técnicas y supervisando todos los pasos. Los mandantes en conjunto con la inspección técnica, es decir, el Gobierno Regional, la Subdere y la Municipalidad a través de la DOM, somos los encargados de autorizar esa ampliación. La empresa intentará pedir un plazo muy alto, mientras nosotros intentaremos reducir esos plazos, y eso es una negociación que hay que tramitar. Pero en términos generales hemos avanzado bastante bien y la obra yo creo que va a llegar a un feliz término. La obra ha funcionado relativamente bien y según los estados de avance y la programación que hay, vamos a salir relativamente cercano a los plazos que estaban fijados inicialmente, que es en el segundo semestre del próximo año”.
Criticó si, que los avances se han logrado “a pesar” del trabajo de las instituciones mandantes.
“Y digo ‘a pesar’ porque a mi juicio ha habido excesiva dilación en la tramitación de los pagos, ellos justifican que los estados de pago no los entienden, y no los entienden porque hay muy poca gente profesional del área de la construcción en estos organismos estatales”.
No obstante, señaló que hasta ahora van bien encaminadas las acciones, y que pronto se entrará en una etapa de mayor rigurosidad.
“Vamos bien, pero vamos a entrar en una fase más crítica porque vienen las terminaciones y trabajos más detallados. La parte de las terminaciones puede ser complicada, y lo es más que nada porque las partidas son de montos muy altos y de trabajo bastante delicados, que es lo que se refiere a detalles en paredes, en pisos en techo, ya que la obra gruesa estaría prácticamente avanzada. Pero confiamos en que la empresa tiene experiencia y debería sacar el trabajo adelante”, adelantó Flores.
Entre los inconvenientes presentados en el camino, advirtió uno grande con el edificio antiguo de la municipalidad ubicado en calle Vicuña Mackenna. “Este edificio antiguo presentaba un problema estructural, de base y bastante complejo, pero ya se ya ha conseguido la alternativa de cómo solucionarlo. Ese sería un problema que demoraría la obra, pero ya tiene sus alternativas”, puntualizó Flores.