Las precipitaciones de este año fueron un aliciente para la Región de Coquimbo y actividades productivas tradicionales de la zona como la agricultura. No obstante, la sequía sigue presente, y así se refleja en los embalses.
La Provincia del Choapa fue donde más lluvias se registraron y así también quedó reflejado en sus tranques. El Bato llegó al máximo de su capacidad, y Corrales vivió una situación similar al llega a un 98,3% de agua acumulada. Por último queda Culimo con un 58,4%.
Sin embargo, en el resto de la región el escenario no es tan favorable. En la Provincia del Elqui el embalse La Laguna quedó con un 32,2%; mientras el Puclaro registra un 16,1%.
La Provincia del Limarí también cuenta con promedios bajos. Los embalses de la comuna de Combarbalá tienen los números más alentadores con un 29,8 y un 32,7% en Valle Hermoso y Cogotí respectivamente. Estos porcentajes decaen en Recoleta con un 17,1% y La Paloma con solo un 12%.
De esta manera, la Región de Coquimbo promedia entre sus embalses un 21,3%, con un volumen que bordea los 288 millones metros cúbicos.
El encargado del área de hidrometría del laboratorio PROMMRA de la Universidad de La Serena, José Luis Ortiz, comentó y explicó esta contingencia, “actualmente la Región de Coquimbo tiene almacenado el 21% de su capacidad, destaca principalmente la Provincia del Choapa, donde cerca del 95% de la capacidad total está siendo almacenada, el embalse El Bato en la parte alta del valle de Illapel está vertiendo. En el resto de las provincias, Elqui y Limarí, en promedio la capacidad total bordea el 27%”, puntualizó.
En esa línea, el ingeniero agrónomo destacó las proyecciones para este verano, “se esperaría que en la Provincia del Choapa los caudales de los ríos se mantuviesen, por lo tanto el estado de los embalses va ser más o menos el mismo que estamos visualizando ahora, lo que nos permitiría tener dos temporada más de agua. En cuanto a las provincias de Elqui y Limarí, esperaríamos durante los meses de verano los últimos deshielos, actualmente no hay mucha nieve en las partes altas de la cuenca, por lo tanto los caudales máximos ya se expresaron en las cuencas, y los caudales que están ingresando a los embalses en este rato son los que vamos a mantener durante la época estival, se podría esperar algún peak de alguna precipitación que no nos enteráramos, opero esta relación debiese mantenerse estable hasta el inicio de la próxima temporada”, sostuvo.
EL EMBALSE MÁS GRANDE
El presidente de la Junta de Vigilancia de Río Limarí y Río Grande, José Eugenio González, explicó que si bien es cierto, La Paloma es el embalse con menor porcentaje de agua acumulada, eso pasa porque es el más grande de la región, “el embalse es mejor mirarlo en número, en porcentaje siempre parece muy poco, porque es el embalse más grande, pero en términos de volumen es el que tiene más agua, en este momento tiene cerca de 90 millones de metros cúbicos. Este año lo más bajo que estuvimos fue con cerca de 7 millones, que es prácticamente un 7 u 8%”, explicó.
De esta manera, el dirigente enfatiza en que “el porcentaje de agua debiese mantenerse, porque ya hay un consumo más alto, de manera que debiera mantenerse y quedar con un pequeño saldo para la próxima temporada. El agua está asegurada para la presente temporada, para la próxima quedará algo para empezar, si es que no tenemos un invierno fuerte en cuanto a precipitaciones estaremos con problemas con serios de nuevo”.
MEDIDAS DE ADAPTACIÓN
En esa línea, José Eugenio González señala que se deben adoptar medidas para continuar adaptándose a un escenario de escaso recurso hídrico, “nosotros seguimos insistiendo en que la solución es generar obras que permitan retener algunos excedentes, o sino, obras de trasvase de una cuenca a otra, por ejemplo este año la cuenca del Choapa va haber un excedente sobre los 100 millones de metros cúbicos, que va ir al mar, entonces nos parece que con los años que llevamos de sequía, hay que pensar en obras adicionales que permitan al menos en un buen nivel los embalses existentes”, sostuvo.
Asimismo, comenta algunas medidas que ya están implementando, “nosotros estamos tomando medidas para buscar soluciones, en la cordillera vamos a instalar otra barrera para la nieve. Gran parte de la nieve se pierde por sublimación, es decir, pasa directamente desde el estado sólido de nieve a gaseoso, entonces con estas barreras se puede reducir las pérdidas de nieve”, puntualizó.