Pese a las lluvias que se han registrado este invierno, la sequía sigue siendo un problema que afecta a la Provincia del Limarí y la Región de Coquimbo.
La situación es de tal gravedad que no solo se han visto afectadas actividades productivas como la agricultura, sino que también se ha visto en peligro el consumo humano.
En este contexto, la empresa Aguas del Valle ha sostenido permanentes reuniones con las juntas de vigilancia, con el objetivo de priorizar el escaso recurso hídrico y establecer un volumen de agua base en el embalse.
Las gestiones han llegado a buen puerto, y de esta forma se ha firmado un convenio para priorizar el agua para consumo humano en Ovalle, lo que finalmente fue firmado este miércoles 31 de julio, en un acto simbólico desarrollado en el embalse La Paloma.
El acuerdo beneficiará a más de 34 mil familias ovallinas, lo que representa a cerca de 136 mil habitantes de la ciudad de Ovalle y localidades aledañas como Sotaquí y Huamalata.
De esta manera, el gerente regional de Aguas del Valle, Andrés Nazer, comentó que fueron largas jornadas de diálogo para llegar a este acuerdo, “estamos celebrando un evento muy importante, y yo diría que histórico. El embalse La Paloma hasta hace unas semanas atrás tenía solo un 1% de volumen de agua, y por eso hubo un trabajo muy intenso entre las organizaciones de la agricultura, las juntas de vigilancia del río, la Casep, las autoridades y Aguas del Valle. Tuvimos intensas reuniones para cerrar este convenio que es muy importante desde el punto de vista de la seguridad del agua potable para Ovalle y sus alrededores”, señaló.
En esa línea, Nazer explica lo acordado, “este convenio tiene la virtud de generar una reserva de agua en el embalse, que permita tener agua potable por períodos más prolongados, de manera que esto nos permita ir haciendo operación con el relleno, pero siempre con una base fija y una cantidad de agua que este siempre disponible”, puntualizó.
“Las condiciones hídricas de esta cuenca son muy potentes, el embalse tiene una capacidad de 750 millones de metros cúbicos, y eso no es casualidad, porque está es una cuenca muy grande, y siempre está aportando algo de caudal. Nosotros como Aguas del Valle que producimos agua potable para la zona, somos usuarios muy pequeños con respecto al volumen del embalse, por lo tanto, con esa reserva que estamos garantizando en este convenio, nos permite tener esa tranquilidad de que siempre tendremos un volumen para el agua potable”, agregó.
IMPORTANCIA DE LOS EMBALSES
Por su parte, el presidente de la Junta de Vigilancia del Río Grande, Limarí y sus afluentes, José Eugenio González, hizo hincapié en la importancia que tienen los embalses para la zona, lo que se ve reflejado en el convenio firmado.
“El clima de la región es muy bueno para el desarrollo de la fruticultura, pero a la vez tenemos poca disponibilidad de agua. Por eso el desarrollo de la fruticultura en la zona ha sido gracias a los embalses, son los embalses los que han permitido desarrollar este rubro, que es mucho más rentable que los cultivos de cereales, hortalizas y otros. Eso ha cambiado la vida de esta provincia, antes esta provincia era muy pobre, y hoy día con los embalses ha sido posible regular y no solo darle seguridad a la agricultura, sino también al consumo humano, que nunca ha fallado, pero era mejor que quedara establecido en este convenio, ratificado en el papel, para que nunca más se olvide que el consumo humano tiene prioridad”, apuntó.
