Crédito fotografía: 
Cedida
Experto analiza el actual escenario delictual en la provincia y en el Choapa, donde se han asentado bandas dedicadas a la producción de cannabis, a la par de crímenes cada vez más violentos. Y si bien destaca el fortalecimiento de policías e iniciativas de legisladores y el Ejecutivo, acusa problemas comunicacionales que repercuten en una sensación de inseguridad que califica como “escandalosa”.

Por Diego Guerrero / Provincia del Limarí 

 

Cerca de 50 mil plantas de cannabis han decomisado en total Carabineros y la PDI en los primeros pasos de las planificaciones institucionales que, cada año en esta temporada, buscan avanzar en la erradicación del narcotráfico.

Pero la tarea en frente es grande y la complejización del actuar de las bandas criminales ha llevado a las policías fortalecer el desarrollo de sus investigaciones, para lograr dar abasto ante las plantaciones que en zonas como Choapa y Limarí, siguen creciendo.

Es una de las caras del avance del crimen organizado, que se viene asentando en el país y que ha atemorizado a la población, a la par de iniciativas en la esfera política para evitar escenarios lamentables que se han visto en otros países de la región.

 

EL NARCO Y LA VIOLENCIA EN LA ZONA

 

Sobre la evolución delictiva en las provincias de Choapa y Limarí, el general (R) de Carabineros y magíster en Criminología, Jorge Tobar, indica que “uno puede ver que desde hace una década a la fecha han ido apareciendo distintos signos, que van marcando un rumbo”.

Específicamente, Tobar indica que en la zona se han visto “episodios de violencia que hace 5 o 6 años eran inexistentes”, enmarcados en una serie de cambios que se han registrado a lo largo de todo el país en las dinámicas delictuales, propiciados principalmente en pandemia y, en menor medida, por la inmigración irregular.

“Hoy te encuentras con hallazgos de cadáveres que tienen explicaciones a partir de terceras personas, y no todos, pero bastante más que lo normal, responden a situaciones que no son las usuales. Los homicidios en Chile siempre tuvieron un relato ‘pasional’, de conflicto vecinal o de ira, pero hoy vemos que las víctimas de homicidio lo son por situaciones donde media un arma de fuego y donde hay autores que no son conocidos y, por tanto, habría una conexión con el crimen organizado”, profundiza.

En el caso de Limarí y Choapa, este fenómeno tiene relación con los cultivos de marihuana, indica el general.

“En estas provincias están emergiendo no uno, sino varios grupos criminales atendiendo este ‘giro comercial’ y están no sólo lidiando con terrenos que acaparan para los cultivos, sino que están tratando de lograr más a expensas de otros grupos criminales y eso genera conflictos que tienen consecuencias y una de ellas es el homicidio”, agregó.

Tobar indica que el crimen organizado se está asentando en Limarí y Choapa “de una manera básica, pero ya está”, lo que ha llevado a la reacción de las autoridades, principalmente en el refuerzo de las policías. Un ejemplo de ello, indica, es la próxima instalación del OS7 en dicha zona. “El crimen organizado, que ya existía, se vio potenciado con nuevos medios y con la inmigración irregular que, en parte, trajo consigo elementos delictuales de otras latitudes de América. Eso ciertamente que al crimen organizado criollo le entregó nuevas herramientas, nuevos métodos y eso involucra, por parte del Estado, del sistema policial y penal, innovar, ser creativos”, señala.

 

"ESCANDALOSA" SENSACIÓN DE INSEGURIDAD

 

Jorge Tobar destaca los esfuerzos que se están realizando en el país en cuanto a “tácticas y estrategias” por parte de la policía desde el año 2020, que han logrado hacer frente a un crimen organizado potenciado.

Asimismo, a nivel parlamentario, valoró los cambios en la tipificación del delito de asociación ilícita, para aquellas delictivas y las criminales.

“Son nuevos tipos penales que son resultado de una nueva mirada sobre cómo se tienen que prevenir estos delitos y qué tienen que hacer la policía y tribunales para abordar de forma distinta un problema que es cada vez más complejo”, indicó.

Por otro lado, mencionó el lanzamiento de dos “iniciativas potentes” de parte del Gobierno: la Política Nacional contra el Crimen Organizado y la creación de un Consejo contra el Crimen Organizado.

Sin embargo, señaló que esto contrasta con el problema de la “sensación de seguridad”, que a su parecer no ha sido bien atendido, debido al escaso conocimiento de estas mismas iniciativas.

“La última ENUSC (Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana) indicó que hay un 90% de temor a lo largo del país, y en Coquimbo es de un 94%. Eso es, yo diría que escandaloso, y es muy importante desde el punto de vista de su gravedad, porque un país atemorizado se paraliza y eso tiene efecto en muchas áreas”, mencionó.

“El error que está cometiendo el Estado es no comunicar adecuadamente lo que está haciendo. Muchas de estas cosas la gente no las sabe y es indispensable para disminuir la sensación de temor”, añadió.

Para el general en retiro, el camino es, precisamente, trabajar de forma aparejada “temas objetivos” en el combate al crimen organizado y la correcta comunicación de las acciones que se están desarrollando.

 

A NIVEL PARLAMENTARIO

 

Al respecto, el diputado Ricardo Cifuentes (DC) concuerda en que “el tráfico de drogas ha exacerbado en Chile y el mundo, la violencia” y lamentó que “se han ido constituyendo verdaderas mafias (…) que han sido más ágiles que muchos Estados”.

Por tal razón, ve con preocupación el crecimiento de narcoplantaciones en lugares como Quilimarí, en Los Vilos, donde este “lucrativo negocio viene acompañado de muertes y violencia cada vez más intensa”.

Sobre el trabajo que debiese seguir el Congreso, Cifuentes apunta a la “inteligencia financiera” para llegar “por la ruta del dinero a los financistas, que normalmente no caen en prisión, porque no actúan en la calle”.

Asimismo, apunta a que el Ejecutivo debe “fortalecer nuestra institucionalidad”, específicamente Aduanas. “Es la institución llamada a ser líder en esta materia, porque es la que controla nuestras fronteras y hasta ahora hemos visto una aduana debilitada, que está colapsada, que no tiene tecnología adecuada ni los funcionarios necesarios”, afirmó. 

 

 

 

Contenido relacionado

- {{similar.created}}

No hay contenido relacionado

Cargando ...

 

 

 

Diario El Ovallino