Es su acceso y puerta de conexión con el resto de la provincia y lo catalogan como “pésimo”. Esa es la impresión de vecinos y pescadores sobre las condiciones del camino que une a la Ruta 5 Norte con la localidad de Caleta El Toro, en la desembocadura del Río Limarí.
María Cárdenas es una de las vecinas de la población, advierte que el camino está muy peligroso, que los vehículos no pueden transitar bien y que eso complica a los pobladores de la zona, incluso de quienes han apostado por el turismo como una forma de ingreso económico.
"Para los vecinos es muy difícil usar este camino porque es un riesgo entrar y salir. Queremos que más gente nos visite, pero con esas condiciones es difícil", apunta Cárdenas.
Al respecto la presidenta de la Junta de Vecinos de la caleta, Macarena Tabilo, señala que los más de 17 kilómetros desde la ruta que conducen al humedal y al pueblo están en pésimas condiciones, está un poco peligroso, lleno de calaminas, hoyos, desniveles, tienen que hacer un mantenimiento completo. El camino ya no da para más. Nos complica a las más de 80 familias que vivimos en la caleta”.
Reconocen que hay una traba en las conversaciones ya que tienen que coordinarse con distintas organizaciones y privados, incluso con la comunidad agrícola. “Entonces mientras no se pongan de acuerdo no vamos a avanzar y los perjudicados somos los vecinos”, asegura la dirigente.
Afectados económicos
Por su parte el presidente del gremio de pescadores de Caleta El Toro, Erick Rojas, destacó que los trabajadores del pueblo también pierden con el estado del camino, del que aseguró que no se le hace un mantenimiento mayor desde hace más de cinco años.
“Las pésimas condiciones del camino nos afectan porque nos bajan las ventas y los precios. El 70 por ciento de lo que nosotros sacamos son algas, y estando malo el camino nos baja el precio. Desde septiembre hasta marzo es nuestra temporada de cosecha de algas, y se trabaja unos cuatro días a la semana, sacando entre todos hasta cincuenta toneladas diarias de algas. Nosotros la traemos del bote hasta la orilla y un intermediario se encarga del traslado hasta la planta de Cerrillos Pobres, pero regularmente dice que se le dañó una rueda, que pinchó un neumático, que rompió un eje, y eso nos afecta a nosotros, porque al final nosotros pagamos la deuda del camión, porque nos compran el producto más barato para reparar el daño” aseguró el dirigente gremial.
Agregó que es frecuente tener que ayudar a un vecino con una camioneta en pana, o a alguien que se salió del camino.
Trabajos
Recordó Rojas que en 2015 se le hizo un trabajo grande con el apoyo de la Onemi, ya que el terremoto de ese año dejó en muy mal estado las laderas del camino.
“El último trabajo grande se le hizo hace unos cinco o seis años, aunque en 2019 hicimos unos trabajos nosotros mismos, los vecinos, con unos neumáticos y unos postes, pero fue un maquillaje que le dimos al camino”, recordó Rojas.
Advirtió que desde antes del verano están haciendo una solicitud formal, de cara a aumentar la cantidad de visitantes. “A veces hay hasta 50 familias que vienen a disfrutar un día, lo que también es un ingreso para nuestros emprendedores, pero mucha gente no se atreve a venir por el mal estado del camino”, señaló.
Desatando el nudo
Ordenar faenas de mantenimiento o pavimentación del camino es más complicado de lo que se cree, ya que pasa por destrabar un nudo administrativo que tiene atadas las manos de las autoridades.
Desde el Municipio de Ovalle se indicó que el camino mencionado corresponde a un privado, por lo que el municipio se encuentra haciendo las gestiones respectivas para que se entregue como bien nacional de uso público.
“Posterior a ello, solicitaremos el enrolamiento de este camino por parte de Vialidad para que pase a ser parte de la red vial básica, y de esta forma pueda asegurar un mantenimiento periódico de este camino. Lamentablemente estas gestiones se han retrasado debido al litigio por la tenencia de los terrenos, entre la comunidad de Alcones y el dueño de la Hacienda Talinay”, señalaron desde la Municipalidad.
