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En las comunas de Combarbalá, Punitaqui y Monte Patria instalaron invernaderos a diversos agricultores para establecer esta opción productiva a través de poca agua y la reutilización de este recurso.

Trabajar en cultivos hidropónicos es la nueva apuesta para 16 agricultores de  comunas rezagadas; Combarbalá, Canela, Monte Patria y Punitaqui quienes por más de un año recibieron la instalación de un invernadero, plantas, asistencia técnica directa y capacitaciones, esto gracias al programa de Introducción del Cultivo Hidropónico de Hortalizas Bajo Invernadero ejecutado por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA Intihuasi a través del Programa de Gestión Territorial de Zonas Rezagadas financiado por el Gobierno Regional.

A través de esta iniciativa por más de un año de ejecución el instituto apoyó a la agricultura familiar campesina, permitiendo diversificar su fuente de ingreso quienes además hicieron un uso eficiente del agua en comunas en donde puede ser escasa para el sector agrícola.

Como una manera de buscar alternativas y sobre llevar la crisis hídrica de la zona, los cultivos hidropónicos han sido una apuesta interesante para todos aquellos pequeños agricultores de la provincia.

En ese sentido, Edgardo Díaz director regional de INIA Intihuasi sostuvo que este método, “busca posicionarse como una opción productiva de bajo requerimiento hídrico, en donde pueden  reutilizar el agua haciendo un uso eficiente del recurso, lo que es fundamental bajo las condiciones climáticas que se nos presentan. Un trabajo que ha sido acompañado y guiado por especialistas de INIA desde el inicio, hasta el apoyo para su proceso de comercialización a través de la entrega de un logo, destacando sus productos por bajo nivel en el uso de agroquímicos”.

Una iniciativa que hoy bajo la condición hídrica que vive la zona se convierte en un nuevo método de reinversión y para producir con baja disponibilidad de agua. Un trabajo que es destacado por los agricultores en especial por mujeres quienes consideran que se desarrolla una agricultura con mejor calidad de vida que trabajar en la tierra.

Constanza Jana investigadora de INIA Intihuasi señaló que una de las grandes ventajas del uso de hidroponía, es el ahorro de agua, que puede ser mayor al 50% del agua utilizada en un sistema tradicional en suelo. En el caso del sistema piloto utilizado (SRF sistema de raíz flotante) en el programa, 168 hortalizas son producidas en 300 litros de agua. Idealmente cada vez que se genere un nuevo cultivo, esto debiera ser cambiado, sin embargo, sino ha habido enfermedades, se puede reutilizar y rellenar para un siguiente ciclo, ajustando la solución, de manera de ahorrar más agua, lo que en tiempos de sequía es una gran alternativa para poder producir.

A su vez, la especialista, no solo destacó la importancia de la actividad como un método eficiente en términos de agricultura, sino que también en la autonomía económica que pueden desarrollar muchas mujeres en este rubro. “Generalmente esta actividad la realizan mujeres que tienen bajo ingresos producto de que son las desarrollan muchas veces las labores domésticas y esto es una alternativa de trabajo en la casa, tienen un invernadero del tamaño del terreno y el trabajo es a una altura fácil, se puede entrar una o dos veces al día, el sistema trabaja de forma automática y significan cosechas que te ayudan a disminuir un poco la brecha económica que existe”, explicó Jana.

Para Isabel Gómez,  agricultora de la localidad Embalse La Paloma en Monte Patria esta experiencia, “fue maravillosa, porque de verdad fue un aporte para mí en la parte económica cambio un poco cómo vivimos en la casa, hay ahora un aporte seguro económico que nos ayuda. Antes había intentado trabajar en hidroponía pero no me había resultado y esta vez con  apoyo del INIA fue muy buena la asesoría”. Tras el apoyo recibido por más de un año hoy Isabel se proyecta en crear un nuevo invernadero para tener una mayor producción de cultivos hidropónicos y constantes en el tiempo, una agricultora quien con esfuerzo ha comenzado a posicionar sus productos en restaurantes locales de Ovalle y Monte Patria.

“Estamos trabajando hace muchos años en la hidroponía, porque creemos que es una alternativa para estas épocas de grandes sequias y en realidad es una opción de cultivo bastante limpia, así que generalmente tenemos módulos demostrativos en el centro y estamos postulando siempre a proyectos. Queremos tener la posibilidad de trabajar con más agricultores en las cuatro comunas. Así que este momento estamos en postulación”, indicó Constanza mediante los proyectos que se han desarrollado en este materia.

Los agricultores han aprendido a trabajar con sistema de raíz flotante con el cultivo de lechuga y actualmente están  incorporando el cultivo del berro, que logra altos precios en hidroponía.  Además están implementando  el sistema de hidroponía en sustrato, para que aprendan a trabajar tomate y zapallito italiano en fibra de coco.

ACERCA DE INIA

El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) es la principal institución de investigación agropecuaria de Chile  vinculado al Ministerio de Agricultura. Tiene  presencia nacional desde Arica a Magallanes a través de diez Centros Regionales, además de oficinas técnicas y centros experimentales en  las distintas regiones del país.

Su misión es generar y transferir conocimientos y tecnologías estratégicas a escala global, para producir innovación y mejorar la competitividad del sector agroalimentario. www.inia.cl.

 

 

 

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